Una nueva propuesta, sin publicar en las guias,encontrada en el bar de Sebas, y que nos ha molado.
Otra aproximación corta, y a la izquierda de la via del infante, sale un espoloncillo, que al verlo, nos invita a subir.
Esta vez mi hermano de cuerda, es Xabi. Como esta muy fuerte, le dejo los largos duros, y me conformo con los blandos.
La otra cordada, es de Aitor, y Ramón.
Una roca muy rica, bien chapada, con una verticalidad.....eso calidad vertical, donde hay que pensar un poco, para encontrar el camino más evidente, sin embarques, con el grado en su sitio.....
Un pequeño largo muy guarro, por un caminito de tierra muy empinado, en el que hay que andar con cuidado, ya que las piedras cobran vida propia, y se van de visita al que está mirando desde abajo.
El largo estrella, es un techo, dentro de la fisura-barranco enorme, donde el canto es muy bueno, pero exigente fisicamente. Donde las chapas, son cordinos en ocasiones, ya que la roca es muy blanda, y eso.....da que pensar....pero esta muy bien protegida.
En poco mas de dos horas y media, estamos todos en la cima del espolón, y comenzamos los rápeles. Siguiendo la misma ruta de subida, pero ahora deslizando. Las cestas echan humo cuando llegamos al suelo. Como aún nos queda algo de tiempo, decidimos matarlo, con unos pegues en la cueva que hay debajo. Un larguillo duro de deportiva, que cada cual hace como quiere, a vista, poleado......la cosa es terminar de matar ese gusano que nos come por dentro, y hace que reventemos los músculos de placer.
La roca de color naranja.....el frescor de estar aqui adentro, los dias que llevamos escalando....el ambiente tan bueno entre nosotros....las cervezas frias.....los baños en el rio.....la tranquilidad de dejar el coche.... el Sebas...el Pitxi... sus informaciones....que dias tan buenos en montanejos. Habrá que plantearse el volver.
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